lunes, 24 de noviembre de 2008

VOLVER EN CLAVE DE CUENTO (1ª parte)

Durante muchos años había sentido la ilusión del niño que llevaba dentro. Esa sensación le había llevado un día a proponerle a ella hacer de cuenta cuentos en su pequeña librería. Cada sábado por la mañana, sentado en aquella alfombra, rodeado de pequeños ojos expectantes, el caracterizaba aquellas aventuras de niños perdidos o abandonados en el bosque, o aquella niña decidida a visitar a su abuela…

Su única recompensa eran aquellos ojos fijos en cada uno de sus movimientos, aquellas expresiones de expectación ante cualquier cambio en el tono de su voz. Poco a poco fue disfrutando más y más cada sábado.

Un día se decidió a escribir su propio cuento, su propio mundo de fantasía con el que sorprender a aquellos pequeños seres que, cada vez más, habían ido ocupando un sitio más y más importante en su vida cotidiana.



Así fue como su cabeza comenzó a sentir como propias aquellas fantasías. Un cuento llevó a otro y una historia hacía surgir el tema de la siguiente.

Durante mucho tiempo sus fieles oyentes asistían a la representación de sus propios cuentos. Al terminar, él entregaba a cada niño un ejemplar de su cuento, de su historia, pues en realidad los cuentos que él escribía eran de ellos, ellos eran su musa y su motivación e incluso en alguno de aquellos cuentos aparecían aquellos niños reflejados.

A lo largo de toda la semana pensaba en ese ratito que ocupaba con ellos. Sin embargo su tiempo se hacía cada vez más escaso para escribir todo lo que quisiera y una día…

10 comentarios:

Malena dijo...

Espero ese un día... con impaciencia. No hay nada más gratificante que sumergirse en el mundo de fantasía de los niños. Creo que yo tengo algo de cuenta cuentos :)

Me alegro muchísimo de que hayas vuelto a escribir. No te me escapes más, ¿eh?

Un beso.

Calle Quimera dijo...

Espero......
Ya me gustaría a mi ser uno de los personajes de esos cuentos....salud¡¡

Syl dijo...

Qué bonito escribir para los niños!!!...

el tiempo, para lo que nos llena, hay que buscarlo debajo de las piedras si hace falta...

besitos.

Allek dijo...

Interesante tu rincon..
saludes..
y mucha paz-ciencia!!

El antifaz dijo...

... y un día se convirtió en su propio personaje. Y decidió vivir en uno de los cuentos porque pensó que era el mejor sitio para vivir.
(mas o menos)
Un abrazo.

Plasoaris dijo...

Malena: Malena en este momento no te imaginas cuanto tienes de cuenta cuentos ;-) Creo que no volveré a escaparme siempre que tu me visites para recordarme que no debo marcharme.

Un saludo.

Plasoaris dijo...

Calle Quimera: nunca se sabe cuando apareceremos formando parte del cuento de la vida de alguien.

Un saludo.

Plasoaris dijo...

Sylvie: Cuanta razón tienes pero a veces no somos dueños de nuestro propio tiempo hasta que decidimos parar el reloj y dedicarnos tiempo a nosotros mismos.

Un saludo.

Plasoaris dijo...

Allek: me alegro de que te haya gustado sobre todo me alegraré si vuelvo a encontrarte por aquí. Un saludo.

Plasoaris dijo...

antifazz: no es mal final aunque ... en fin cualquier cuento merece la pena vivirlo como personaje si uno está rodeado de buenos coprotagonistas.

Un saludo y me alegro de volver a verte por aquí.